El mítico cortijo ‘El pez azul’, situado en San José, sigue con su espectacular agenda veraniega. Para finalizar el mes, el cantante Iván Ferreriro, ex vocalista del grupo Los Piratas, actuará el sábado 30 a las 22.30 horas, será sin duda el plato fuerte del cartel de verano que tiene programado el local.Antes, el sábado 16 de julio a las 00.00 horas el grupo de flamenco ‘Duendeando’ presenta un baile innovador y racial de mano de la bailaora almeriense Ana Alonso. El humor también tiene hueco en las noches veraniegas de ‘El pez azul’: el sábado 22 de julio a las 00.00 horas acturá el cómico almeriense Pepe Cespedes.
Una historia por descubrir
Este emblemático sitio cuenta con una historia de casi 200 años de antigüedad, en la que está presente una obra de uno de los poetas y dramaturgos más celebres, Federico García Lorca, como es ‘Bodas de Sangre’, una historia real de la cual el poeta de Fuente Vaqueros hizo un drama en verso.
El nexo de unión entre ‘El pez azul’ y ‘Bodas de Sangre’ está en uno de los protagonistas de aquel trágico suceso que inspiró la obra, vivió alli: Casimiro Pérez Pino, el novio que el padre de Francisca eligió para casarse, aunque ésta no estaba enamorada de él y se fue con un primo suyo la noche antes de la boda. Cuando Casimiro Pérez y su familia abandonaron el cortijo, tras residir allí durante un cuarto de siglo, pasó a ser un local de estilo hippy llamado ‘El pez rojo’, una comuna que duró alrededor de unos cinco años.
Durante todo este tiempo, el local se consideró todo un referente de la movida almeriense y de la marcha en España en los años de esplendor del movimiento hippy. Fue muy conocido fuera de nuestra provincia y fue visitado por personajes célebres de aquella época.
Después de permanecer cerrado durante 15 años, ‘El pez azul’ ha vuelto a abrir sus puertas. Y aunque como comenta su dueño, Ángel Miguel Fernández, los tiempos han cambiando bastante, se sigue conservando toda la magia de un sitio al aire libre: “El Cortijo tiene la estética típica de los cortijos almerienses, donde se puede disfrutar del paisaje de Cabo de Gata rodeado de pitas”.
La razón por la cual se decidió abrir de nuevo este mítico lugar fueron los buenos recuerdos y momentos: “Se volvió abrir con el afán de sentir lo que sentíamos antes la gente que íbamos allí hace 15 años, pero ahora con unos cuantos años más”. También pretenden llevar una agenda cultural distinta a la que ofrecen otros locales de Almería, apostando por la música de los años ochenta y por grupos almerienses.
FUENTE Y FOTO: La Voz de Almería
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